10 Cosas a Saber: Mitos y verdades sobre emigrar
¿Me quiero ir del país, pero tengo miedo, no sé por donde empezar?
¿A dónde voy? ¿Y como hago financieramente? ¿Cómo le digo a mi familia? ¿Y si todo es un fracaso? ¿Y si no encuentro trabajo? ¿Pero ya no soy joven, será que puedo? ¿Volver a empezar? No quiero soltar lo que ya tengo acá.
Estas son los miedos, mitos y verdades más comunes. Todo lo que les explico va desde mi experiencia de 14 años en Australia, echada del país, con más de 5 visas, una empresa y ahora ciudadana.
Inmigración es el término que define, después de unos meses, el deseo que empezó siendo un “me quiero ir”; “quiero irme a vivir en otro país” ¿cierto?.
Ya sea por problemas económicos, a aprender otro idioma o simplemente por buscar una mejor calidad de vida y oportunidades, la migración es un derecho humano.
Cuando decidimos emigrar, millones de cosas pasan por nuestras mentes, y aunque la aventura nos hace sonreír, a veces el miedo se impone.
Sin embargo, hay muchas cosas que debes saber antes de inmigrar.
Como nómada digital, empecé este viaje hace 14 años y tengo ideas claras de qué implica migrar, las realidades y mitos de lo que siempre nos han contado.
El problema más grande viene de los miedos inculcados por nuestras culturas y familias. Esas frases de:
“Mijita, ¿y usted sola?
¿Y de qué va a vivir?
¿Con qué plata se va?
¿Y por qué nos va a dejar?
Claro existen realidades como deudas y apegos que en la mayoría son materiales o familiares. Pero está en nosotros el aprender a dejar ir a despegar, salir de nuestra zona de confort y demostrarnos a nosotros mismos que somos unos guerreros.
Al tomar esta decisión, debemos responder primero 5 preguntas esenciales:
¿Migramos solos, en pareja o como familia?
¿Nos vamos por meses o por años?
¿Quiero ser independiente o voy bien compartiendo cuartos y casa?
¿Tengo presupuesto para mantenerme por al menos 2 meses?
¿Estoy dispuesto a ser vulnerable y trabajar con humildad?
¿Respondimos?
Listo, ahora sí ¡empecemos!
Los 5 Mitos más comunes sobre la inmigración
1.-Se necesita MUCHO dinero para emigrar
Cuando hablamos de procesos migratorios, no es necesario tener una cantidad tan numerosa de dinero.
La emigración es una decisión que lleva mucho, por lo tanto, inmigrar implica el irse lo más legal que puedas de tu país: la indocumentación puede ser muy costosa a largo plazo.
Lo cierto es que no necesitas cantidades de más de cinco números para irte a un país. Si vas con tus documentos legales en regla, el país receptor te permitirá trabajar en empleos de medio turno por el cual serás remunerado.
En caso de que no consigas trabajo inmediato, puedes optar por buscar trabajo remoto mientras te terminas de establecer.
Y según a dónde vayas, puedes revisar estos tips de cómo viajar más barato que sé que te servirán un montón.
Checklist al migrar
Documentos legales en regla
Seguro de vida o seguro médico
Vacunas recientes
Ahorros suficientes por un minimo de 2 meses
Mente abierta a aprender de todo y ser humilde
Sin embargo, una de las cosas que se deben hacer para migrar es revisar las páginas gubernamentales y tener noción de que:
La cultura es distinta, y las normas sociales no escritas también lo son: Hay que sacarse el disco de “en mi país…”
Te fuiste por algo ¿no? ¿Para qué quieres lo mismo?
2.-Debes saber perfectamente el idioma de ese país
Esto es uno de los mitos más comunes de la inmigración. Si bien es una parte importante, no es obligatorio que lo hagas. Pero aquí hay dos cosas que juegan un papel muy real:
· ¿Cómo quieres migrar?: Si quieres migrar en calidad de estudiante, sí, debes tener un nivel intermedio del idioma. Si llegarás a casa de familiares o amigos, te adaptarás mejor.
· Inglés y migración: En la mayoría de los países europeos de habla inglés fluido. Si quieres trabajar, estudiar o comunicarte de una manera más directa, lo ideal es que manejes el inglés de una forma media-avanzada.
3.-Puedes entrar como turista y quedarte a vivir
Esto es falso, totalmente falso.
Viajar como turista y tener planes de quedarse “siendo turista” es ilegal.
Cuando ingresas a un país siendo turista debes tener ciertos papeleos, empezando por tu boleto de avión de regreso a tu país. Te estarán supervisando como turista y no podrás trabajar con este estatus.
Este es un mito muy popularizado sobre la emigración y es riesgoso y problemático para quienes lo hacen.
Tú, como turista, tienes plazo máximo de 90 días en un país para regresar a tu país de origen: no intentes ser residente y turista porque no funciona así.
El flujo migratorio es quizá el movimiento civil más regulado y vigilado en muchos países, no empieces una nueva vida llena de problemas.
4.-Necesitas un título universitario para emigrar
Esto es un mito muy frecuente sobre la emigración. Es falso: no necesitas un título universitario para emigrar a un país.
Tu documentación en regla es tu mejor protección.
Estudiar en otro país es un proceso posible.
Si quieres estudiar puedes viajar como Au Pair y estudiar ya sea el idioma que quieres aprender o en los llamados collegue, así como puedes optar a programas de becas o intercambio.
Si es por cuestiones de trabajo, una de las cosas que debes saber al emigrar es que eres un outsider, un foreigner. Los países siempre apostarán por lo propio, así que haz lo tuyo. Edúcate, aprende y valora a quienes te ayudan o te dan oportunidades de trabajar y un voto de confianza. Go for it!
5.-Entrar ilegal es fácil
Este mito es de los más peligrosos. Ciertamente una de las mayores realidades de la inmigración es que cantidades numerosas de personas lo hacen de manera ilegal, pero no porque sea fácil.
Aquí debemos entender que el desespero y la mala calidad de vida juega un papel importante y hace que las personas huyan, teniendo papel de refugiados, hacia otras naciones.
Inmigrar con los documentos en regla te dará seguridad y tranquilidad lo cual no tiene precio, y nunca dependerás de la compasión de los demás.
Así como están los mitos sobre la inmigración, existen muchas realidades que a veces familiares o amigos a quienes les ha ido bien, o el mismo personal de la agencia no nos dice, y se empeñan en pintarnos todo color de rosa como en las películas.
Las 5 Realidades más comunes de ser Inmigrante
1.- Al principio NO trabajarás en lo que esperas
Cuando inmigramos, uno de nuestros miedos es quedar sin fuentes de ingresos y estar en un desbalance económico. Al llegar a otro país, nuestra prioridad es establecernos, tener un lugar propio y poder cubrir nuestras necesidades.
Si te animas y tienes inventiva, puedes pensar en crear ingresos pasivos a la par de tu trabajo actual.
Una de las realidades que debemos tener en cuenta es que por un gran periodo de tiempo serán trabajos de medio tiempo.
Inmigrar es un desafío al que nos enfrentamos para poder realizar nuestros sueños. Sé humilde. Tus metas son tuyas, no todos las entenderán, entiende y da lo mejor de ti SIEMPRE.
Trabajar en un restaurante, hacer delivery, limpiar o incluso, ser niñera no tiene por qué hacerte sentir menos.
Los sueños lo valen todo ¿no?
2.-Aprendiendo de la Soledad
Una de las mayores verdades al ser inmigrante es esta: sentirse solo y querer volver.
Como personas sentimos amor y apego por esas personas, olores, sonidos y sabores que dejamos atrás, en nuestro país que ahora está a muchos kilómetros de distancia.
Nadie nos dice cómo ser migrante en cada país, pero debes estar preparado para esto. Y está bien.
Crece, aprende a ver lo positivo de la soledad, busca grupos de lectura o movimientos ecológicos. Enriquécete de la cultura, y disfruta de lo nuevo.
No te empeñes en reprimir emociones, de esos momentos se aprende, y se crece. El aprender a abrazar la soledad es aceptar nuestras sombras y llenarnos de amor propio, que una vez mas hace parte del crecimiento personal.
Si te animas, prueba a hacer mi ritual de luna llena, es mi detox mensual para aprender de mis emociones y migrar es un torbellino de emociones.
3.-Los migrantes emprendemos
Contrario a lo que muchos piensan, los inmigrantes emprendemos.
Existen ciertos números importantes a destacar. Los inmigrantes se mudan a países con mejores oportunidades y calidad de vida, y a pesar de que el papeleo de migración sea tedioso, somos beneficiosos para ambos países: el actual y el de origen.
Al establecernos en un país, terminamos emprendiendo y creando fuentes de trabajo allí.
De acuerdo con el Banco Mundial, el 85% de los ingresos que obtienen los migrantes tienen como destino la economía de ese país, y el otro 15% ayuda a la economía de su país de origen al ser enviados como remesas.
La realidad es que, como migrantes, ayudamos a la economía de nuestro país de origen, y ayudamos al país actual siendo un ciudadano activo.
4.-Tus talentos ocultos salen a la luz
Más de una vez escuchamos historias de personas que terminan trabajando en lo que menos piensan.
Como inmigrantes debemos ser una esponja: aprender todo lo que podamos.
Quizá nunca esperaste que te gustara ser barista, o hacer tortas, o incluso llegaste a encariñarte con los niños que cuidaste luego de negarte a ser niñera. Cada inmigrante tiene una realidad distinta, pero todos hacemos esfuerzos.
Yo amo el diseño gráfico, ¡pero nunca pensé que disfrutaría siendo profesora universitaria! Y en mis primeros años en Australia, trabajé en bares, pero es algo que hasta Dua Lipa hizo ¿no?
¿Qué hacer si eres migrante? Aprende. Cada día.
5.-Recortar gastos, le das valor a todo.
La realidad más cruda de ser inmigrante. Life is life.
Cuando nos movemos a otro país, el impacto económico es uno de los más notorios. Inmigrar implica recortar gastos al máximo, privarte de comprar esa blusa que te gustó porque debes pagar el alquiler, caminar mucho para no gastar en taxis y llegar con números positivos a fin de mes o preparar comida siempre para no gastar en delivery.
Esto siempre será duro, pero te enseñará disciplina y perseverancia en tus sueños.
Pero aun así, establece tu meta, ese carro, apartamento propio o ese celular, quizá esa inscripción de la universidad, ganar más no significa gastar más. Yo solita aprendí cómo gestionar mis finanzas viviendo en Australia y ¡te puedo enseñar! ¿Te anotas?
Como inmigrante, que empezó migrando para aprender inglés y terminó siendo nómada digital, sé que inmigrar no es difícil, lo difícil es tener éxito allí, en tu nuevo país.
Te comparto estos links que te pueden ayudar a escoger a dónde inmigrar
Inmigrar es distinto para cada uno.
RECUERDEN:
¡Serás un experto en vivencias, podrás ahorrar y valorar tus habilidades y sobre todo, cambiarás de mentalidad y crecerás como nunca! Pronto escribiré mucho más sobre esto: educar y contarles todo lo que a mí nunca me dijeron.
Ale
