¿Cómo es vivir en una van?: Mi experiencia viviendo y viajando sola en Mostaza

Vivir en una van fue un propósito que siempre tuve, pero que como a todos, la pandemia me empujó a concretarlo y resulta que ahora es mi vida.

Pedro, Petra, Mostaza y Alejandra. 

¿Quienes somos? ¿Cómo caben 4 en una van de unos 10m³?

Les he contado un poco de mi Vanlife, pero aquí les va un poco más de todo lo que me llevó a vivir on the way.

Mostaza y sus inicios: El paso para tomar mi decisión

Decidí convertirme en nómada digital porque es el experimento de ser lo que estudio. ¿Como así, Ale? Luego de graduarme como Diseñadora Gráfica en la Universidad de Griffith, donde soy profesora, decidí empezar un doctorado.

Un doctorado que estudia la vida de los nómadas digitales y el futuro de la industria creativa-comercial.

Pero entonces empezó la pandemia, y ¿cómo iba a hacer mi doctorado sin poder moverme a estudiar este tipo de vida?

Pues me uní a la tribu, y me convertí en una nómada digital para viajar, vivir y experimentar esta vida conociendo a personas para así hacer mi doctorado. ¡Yo soy mi propio caso de estudio!

Mostaza es mi vida, mi casa, mi esfuerzo y mi ideal. Mostaza es mi van.

Compré mi van, una Renault Master del año 2013 con AUD $21.000 y le invertí AUD$15.000 para hacerla a mi gusto, pues al día de hoy sigue siendo mi hogar.

Me arriesgué y no me arrepiento.

Iniciar desde cero siempre da miedo y no es algo de lo que me escape, pero asumiendo riesgos he logrado ser quién soy.

Tenía mil y un preguntas luego de comprar mi van: ¿Y ahora qué? ¿Como la hago habitable? ¿Como meto toda mi vida aquí?

Una vida sobre ruedas : Decisiones día a día

Vivir en una van y ser nómada digital es una responsabilidad enorme. 

Mi vida en la van tiene tres tareas todos los días; mantenerme con vida, no dañar el medio ambiente y explorar el mundo mientras trabajo.

Mis días en Mostaza (mi van) se tratan de:

  • Hacer inventario de comida.

  • Planear cuándo debo ir a lavar ropa.

  • Mirar cuánto diesel me queda.

  • Buscar gimnasios cerca o un lugar privado para bañarme.

  • Mantener las baterías por encima del 50%.

  • Tratar de aumentar espacio cuando comparto viaje con amigos.

  • Saber cuánta agua me queda almacenada.

  • Buscar dónde verter las aguas grises.

  • Pensar dónde quedarme, por cuánto tiempo y si es peligroso o no.

  • Acostumbrarme a dormir sin aire acondicionado.

Y es que el vivir en una van te reta a necesitar más de el ambiente, y por lo tanto a cuidarlo más. 

Si, es cierto que las vistas son maravillosas, que el sentimiento de independencia es increíble, pero cuando tu lifestyle es una vanlife, te vuelves consciente de todo lo que haces.

Una vida sostenible como vanlifer es totalmente alcanzable, pero nunca llegamos a “cero desperdicio” porque es imposible no consumir nada.

¿Y cómo es que se puede tener una vida sostenible?

Como nómada digital y habitante de una van puedo decir que son muchísimas las ventajas de vivir en una van, aunque puedan variar para cada persona, sí las hay.

Les cuento por qué vivir en una van te hará cambiar tu punto de vista de la vida, tu personalidad y tu mentalidad.

Lo que vivir en una van enseña: Minimalismo y conciencia ecológica

Las generaciones más recientes hemos desarrollado una conciencia ecológica, pues padecemos y vemos los cambios significativos del cambio climático.

Y es que el vivir en una van, por muy lindo que suene “vivir viajando” te marca y te enseña a razonar todo sobre este estilo de vida.

En mi caso particular, son 5 las enseñanzas de vivir en una van:

1.-Te vuelves un consumidor más consciente

Cuando vives en una van tienes poco espacio, y debes administrar muy bien el combustible en cada ruta.Sin poder almacenar mucho, te queda: 

  • Al momento de comprar comida elegimos algo que sea duradero y que podamos llevarlo en nuestros envases, no en un empaque que ocupe mucho espacio.

  • Al hablar de ropa (esto me costó MUCHO como mujer) aprendes a usarla y aprovecharla toda sin tener que estar comprando ropa cada fin de semana.

  • Procuras tener tu envase para agua y no comprar botellas de agua cada tanto para beber.

  • Aprovechas y usas eficientemente los dispositivos tecnológicos.

  • Reciclas el agua o tratas de ensuciarla tanto como se pueda antes de eliminarla.

  • Viajas lento, literalmente, a baja velocidad para no consumir tanto combustible.

  • Le buscas un segundo y hasta tercer uso a todo.

2.-Aprendes a convivir con la incertidumbre

Vivir viajando, vivir rodando por el mundo te ayuda a vivir fluyendo. Esto no quiere decir que no te moleste o que siempre estés preparado para lo que ocurra. Vivir en una van te ayuda a entender que no puedes dar todo por hecho.

Cualquier percance que pueda pasar, de hecho sí puede pasar.

En mi caso, que viajo sola, he aprendido mucho sobre autos y electricidad para poder resolver mis problemas técnicos.

Sin embargo, como consejo, siempre prevengo todo lo que pueda pasar. Es decir, revisar el tanque de combustible, la temperatura del motor, que todas las llaves de filtros estén bien, los circuitos eléctricos y todo lo que recuerde.

Aunque no se diga mucho, viajar en van es también estar sin señal de línea telefónica o internet en muchas ocasiones (¡y más siendo como soy que quiero ir a donde nadie va!)

3.-Mentalidad de “Vivir sin dejar rastro”

Cuando viajas y vives en tu casa, aprendes a amar todo lo que te rodea porque es lo único que tienes. Los recursos son finitos. Y es que esto es una regla de todo el que viva su vida en una van.

Tanto en lugares públicos como playas y parques nacionales, o en lugares específicos como campersites, la regla de oro es leave no trace: dejar todo limpio, todo en orden tal y como estaba, que nadie sepa que tú estuviste allí.

Es una vida en comunidad, dejar todo limpio para que otras vans, otros viajeros en furgoneta puedan vivir lo que tú sin que cierren el lugar por contaminación.

Y a forma de reflexión, es una regla social que no sólo debería ser para la vida en una van.

4.-Priorizas y utilizas todo

En una van no hay espacio para mucho, así que le sacas el máximo a todo lo que posees. 

Quizá les suene loco, pero yo en mi lavaplatos ¡también lavo mi ropa íntima! los sofás que me sirven de “sala” también son mi cama por las noches, y la llave de agua para lavar los platos puede sacarse por la ventana y usarse como ducha.

En Mostaza guardo experiencias, momentos y aventuras, no cosas materiales.

Mi “ropa de salir” es ropa, porque si a veces tengo la otra sucia y no he podido ir a lavarla, ¡pues la usaré! 

Algo muy importante, que les mencionaré en otro blog sobre lo que debes tener en cuenta al momento de escoger una van es que debes escoger muy bien tu van porque la altura y la curvatura de sus lados será esencial para tu espacio y vida ahí.

5.-Conoces las “rutas no comerciales”

Vivir en van es vivir a tu ritmo. No dependes de una agencia de viajes, de un guía turístico o de un paquete para turistas que te diga a dónde ir y cuánto te costará.

Por eso, se conocen pueblitos de ensueño, personas locales que son grandes seres humanos así no sean “gente de negocio”, te deleitas con platos locales que no están en menús de hoteles (y que son mucho menos procesados).

Incluso puede que por la falta de señal puedas llegar a perderte un poco y dar con algún rincón escondido donde luego quieras quedarte.


Slowmads: ¿Quiénes son y qué tienen que ver con los nómadas digitales en el 2023?

Como les venía comentando, el movimiento ecológico y la conciencia ambiental es algo innato en los que viajamos en van, o al menos en su mayoría.

El término slowmads hace referencia a eso, a slow y nómadas, pues se trata de vivir lento.

El vivir y viajar en una van permite moverte a donde sea, cumpliendo las normas migratorias pero sin tener que preocuparte por mucho más que por suficiente combustible.

No todos los que vivimos en van somos nómadas digitales.

En su mayoría, la comunidad nómada viaja en avión, y sabemos que las emisiones de los aviones conforman el 3% del dióxido de carbono en la capa de ozono.

El Foro  Económico Mundial habla sobre los slowmads en este artículo.

Al viajar, y como vanlifer y nómada digital, es necesario recordar ciertas cosas. Si bien existen más de 15 países con visa para nómadas digitales, viajar cada 3 semanas no es necesario.

  • Si no vives en una van, como nómada, te recomiendo viajar a países vecinos, en su mayoría se conectan por trenes o rutas expresas. Puedes quedarte más de 3 meses en un país y al vivir en espacios de co-living conocerás personas y ahorrarás dinero, aportando a una economía compartida y al ambiente.

  • Como viajera en van, te recomiendo que ya que llevar tu van de un país a otro, a menos que estén conectados por frontera es poco probable, contribuyas a la vida en comunidad y economía alterna, ¡rentando tu van puedes generar ingresos pasivos! En tus próximos destinos, camina, renta una bici o usa el transporte público.

¿Cómo la vida en van es sostenible? :5 formas en las que vivimos y viajamos siendo eco-friendly

  • Usamos energía solar

Es la forma esencial en la que obtienes energía al vivir en una van, furgoneta, un camión e incluso un auto 4x4. Viviendo en Mostaza, pocas veces he llegado a consumir rápidamente la energía que producen+ mis paneles solares.

Según los equipos tecnológicos que tengas, su estado y las baterías o inversores que tengas. En mi caso, mi van tiene 2 paneles solares de 660 voltios, lo cual me alcanza para 3 días.

  • Generamos menos desechos

Al no tener donde almacenar, no podemos consumir mucho, pues quedaríamos fuera de nuestra casa con tantas cosas materiales. 

La ropa se usa al máximo y por cuestiones de tamaño y refrigeración, compramos alimentos instantáneos o de duración media que no necesitan un empaque muy elaborado, o que en su mayoría, sean 100% naturales.

  • No consumimos gas

Si instalar un sistema de aire acondicionado es costoso, un sistema de gas es inimaginable. Las estufas eléctricas (y pequeñas) junto con las fogatas son nuestros métodos de cocción para comer.

  • Usamos menos químicos de limpieza

Por ser espacios tan pequeños, es rutina limpiar a medida que ensucias, pero no puedes acumular nada. Así que sólo será polvo, arena y uno que otro resto de comida lo que haya que limpiar.

  • No producimos contaminación lumínica

En una van tienes toda la luz necesaria solo con abrir las puertas y ventanas. En Mostaza, la poca iluminación que tiene dentro es LED y no pasa de los 6 bombillos. 

Si creen que mi historia es increíble, deberían leer sobre esta familia viviendo en un carro viajando por el mundo.

La vida en una van tiene miles desventajas y mil y un ventajas. Desde hace 2 años, viviendo en Mostaza, con Petra y Pedro (Petra es una enredadera y Pedro es un cactus, ambas son plantas, yo AMO lo verde) me ha enseñado más de mi misma de lo que podía haber imaginado.

El estilo de vida de un vanlifer es la adaptación constante y saber fluir.

¿Lo has hecho? ¿Qué te detendría al pensar en vivir en una van?

Gracias infinitas por leer hasta acá

Un abrazo

Ale